Un protector solar, además de servir para estar bronceado después de una exposición prolongada al sol, también actúa como tratamiento que reduce el riesgo de sufrir quemaduras, previene el envejecimiento y la aparición de manchas en la piel y protege de los rayos nocivos del sol (UVA y UVB).
Es aconsejable hacer uso de un protector solar adecuado diariamente y en cualquier época del año. No solo en verano ya que, aunque no notemos el sol con tanta fuerza como durante este periodo, los rayos del sol siguen siendo igual de perjudiciales y nocivos para la piel todos los días del año.
Algunos expertos en cirugía dermatológica, recomiendan usar como mínimo un protector solar SPF 30. No obstante, para aquellas personas que tienen un tono más claro de piel y, por tanto, más sensible a la exposición solar, se les recomienda que usen un nivel SPF 50+. De esta manera, consiguen una protección extra.
LA ROCHE POSAY ANTHELIOS XL SPF50+ o BOOTS SOLEI SP SUN CARE SPRAY SOLAR SPF50 son dos ejemplos que se ajustas perfectamente a los casos mencionados.
Cuanto más alto sea el número que acompaña al factor de protección solar, más largo será el tiempo que podrás estar expuesto al sol sin sufrir quemaduras ni ningún otro de los efectos negativos que puede provocar.
Otro consejo que también suele plantearse es que el protector se aplique unos 30 minutos antes de la exposición al sol para que la piel tenga el tiempo suficiente de absorberlo y repetir el proceso cada dos horas.
En Farmacia Frías disponemos de una amplia oferta de protectores solares, con distintos factores de protección, para que encontrar el que mejor se adaptar a ti sea muy fácil.
