Hoy en Farmacia Frías vamos a desvelar algunos datos sorprendentes relacionados con el cuerpo humano que seguro que algunos no sabíais y os dejarán con la boca abierta.
1. Algunas partes de nuestro cuerpo son innecesarias.
Nuestro cuerpo tiene algunas partes sin las que podríamos vivir sin ningún tipo de problema ya que por evolución, ya no las necesitamos.
Lo curioso de todo esto es que nuestro cuerpo todavía las conserve, pero aunque no sean necesarias para vivir, el problema viene cuando alguna de estas partes se daña ya que puede provocar mucho dolor.
Una de estas partes es el coxis, el cual si se rompe, duele muchísimo; el apéndice, aunque produzca glóbulos blancos, no sirve para nada más; las dichosas muelas del juicio no sirven absolutamente para nada, pero cuando hay que quitarlas, es muy doloroso; y el dedo meñique, ¿a quien le gusta sentir ese horrible dolor cuando nuestro dedo choca con todo lo que se encuentra en su camino?
2. Rarezas.
Como:
-Las mujeres tardan más tiempo en quemar grasas que los hombres.
-No podemos hacernos cosquillas a nosotros mismos.
-En 30 minutos, nuestro cuerpo libera la suficiente calor como para hervir medio litro de agua.
3. ¿Tienes tendón?
Un 15% de personas no tienen el tendón encargado de flexionar la muñeca, el cual se encuentra en unido al flexor radial del carpo, un músculo del antebrazo.
Para comprobar si lo tienes, une el dedo pulgar con el meñique y dobla la muñeca, si lo tienes, en la parte interior de tu antebrazo apreciarás cómo sobresalen dos tendones, si no, solo apreciarás uno.
4. Algunas personas se desmayan después de orinar.
Esta afección es conocida como síncope vasovagal, y se produce cuando al orinar se estimula el nervio vago, lo que causa un descenso de la presión sanguínea, y como consecuencia, hace que la persona se desmaye.
5. Tenemos un riñón más alto que el otro.
Aunque siempre hayamos visto representaciones de ellos a la misma altura, lo cierto es que el riñón izquierdo está un poco más arriba que el derecho.
Esto se debe a la presión que ejerce nuestro hígado en el espacio sobre el riñón derecho.
Algo parecido ocurre en nuestros pulmones, el izquierdo es más pequeño que el derecho, por el espacio que ocupa el corazón.